El profesor de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad de Talca, Rodrigo Palomo Vélez, llevó a cabo una estadía de investigación en el Departamento de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de Valencia, lugar donde desarrolló su proyecto sobre “Trabajo decente y transición justa”.

A lo largo de su estadía, que se extendió del 11 de diciembre al 23 de febrero, el académico trabajó junto a un grupo de investigación de dicho departamento, cuyos resultados se tradujeron en algunos capítulos de libros y en un artículo científico.

Trabajo decente y transición justa

Respecto a la temática abordada, el profesor Palomo señaló que “tiene que ver con dos tipos de transiciones: la transición digital, es decir, cómo pasamos de los trabajos análogos a los trabajos digitales y la transición llamada verde, que tiene que ver con cómo pasamos hacia trabajos que sean menos contaminantes y que influyan menos en el cambio climático”.

Sobre este último tipo de transición, indicó que la principal diferencia entre los países europeos, en donde existen modelos de relaciones laborales más fuertes, y los países latinoamericanos está “en el poder sindical, colectivo, en cómo las organizaciones de trabajadores, en dialogo con las organizaciones de empleadores, están asumiendo el problema y que el trabajo es una forma en que el cambio climático puede intensificarse”.

Agregó que en Europa, por ejemplo, “los sindicatos intentan impedir lo que es el dumping social, es decir, que las empresas se instalen en países con poca regulación laboral, malos sueldos, y en donde usualmente se puede contaminar sin ninguna consecuencia”.

Manifestó además que “en países en donde no hay ese dialogo social es mucho más difícil llevar a cabo estas regulaciones, y ese es el caso de países latinoamericanos, entre ellos Chile. Actualmente en el país, el Ministerio del Medioambiente, el Ministerio del Trabajo y el Misterio de Economía ya son conscientes de que esto está ocurriendo y están tratando en generar ese dialogo social, pero aún existen limitaciones normativas”, concluyó.